A continuación una de las cartas que recibe habitualmente el Dr en consulta y que responde basándose en su método de trabajo.
¡Buenos dias Fabio!
Me llamo J... de Zaragoza, tengo 29 años
y soy de esa clase de chicos que decidió no quedarse sentado mirando
como se iba su ex-novia y que intentando buscar una solución de la
manera más fácil me encontré con su "curso".
Ahora mismo estoy escribiendo estas líneas para dirigirme a usted pidiéndole consejo porque me encuentro en una
situación un tanto desesperada:
Estaba siguiendo
el método de "contacto cero" cuando ya había pasado un mes y poco, desde
el día 12 de abril hasta este sábado 16 de mayo en el que alrededor de
las 08:30/09:00 de la mañana después de haber estado tomando unas copas
con los amigos y en el momento de irme para casa decidí
inconscientemente y sin control alguno sobre esta decisión, acudir al
domicilio de mi ex-pareja con el fin de vigilar, y la excusa de hablar
con ella, llamándola al portero automático insistentemente sin obtener
respuesta, pero no contento con el resultado me acerque a la ventana de
su dormitorio y subí la persiana sorprendiéndome con un grito suyo. A lo
que rápidamente la llame a su teléfono móvil, para pedir disculpas y
para que no se asustase, sin marcha atrás posible, mostrando mis
sentimientos y dejando ver mi frágil estado de ánimo.
Pero todavía al día siguiente, es decir el domingo a
la misma hora, la envié este sms: "Hoy igual que ayer e esta misma hora
estoy borracho, solo que ahora me he pensado las cosas 2 veces".
Sin ningún tipo de consuelo y preso de los celos y
pensamientos más prehistóricos esta madrugada viendo su última conexión
al "Whatsapp" cogí el coche y fui a espiar si se encontraba en su casa
pensando que estaría en la casa de su hermana, y para descartarlo del
todo enviarla otro sms cuando distinguí dentro de la casa la luz de la
televisión, procediendo a enviarle el sms que escuché como lo recibía su
teléfono, y llamarla de nuevo insistentemente loco de celos de pensar
que había llegado a las tantas de qué sé yo... consiguiendo alterarla y
que me dijese que no la llamase más porque iba a conseguir obligarla a
cambiar de número de teléfono, que no eran horas y pidiéndola que
habláramos.
He tirado por la borda un mes valiosísimo en el que
no he respondido a sus mensajes, ni a sus llamadas, y ahora necesito
otro "atajo" por el que reincorporarme a la circulación de la carretera
que me iba a llevar a su reconquista.
Siento haberle contado toda esta parrafada Sr.
Stussi, pero necesito consejo. Estaba pensando en volver a llamarla a lo
largo del día para disculparme y para decirla que soy estúpido por
haber caído tan bajo en momentos de flaqueza por culpa de la melancolía y
darle las gracias irónicamente por su comprensión y falta de humanidad.
Sin un futuro nada claro.
Un saludo
Estimado amigo,
Si has leído el curso sabes que has cometido uno de los errores típicos en esta etapa posterior a la separación. Las mujeres quieren hombres que se respeten a sí mismo, no que se arrastren para pedir perdón o para justificarse. Si efectivamente hubiera que pedir perdón por algún motivo (cosa que se hará dentro de la pareja, no en un estado de separación) será siempre desde la masculinidad, y posteriormente dando carpetazo al tema, los lamentos, sollozos y otro tipo de actitudes serviles generan una imagen de inferioridad que la mujer no desea ver a su lado.
Por lo mismo que te comento antes, tampoco deberías hacer lo que me comentas en el último párrafo. Si ya has cometido ese error acosándola, no vuelvas a hacerlo para pedir disculpas por lo que has hecho. La intención del contacto cero es demostrar que tienes dignidad y estás seguro de ti mismo. Que para ti lo importante es ser una persona autónoma y que para ser feliz te basta contigo mismo, si además tienes una mujer a tu lado que quiera compartir tu felicidad, pues fantástico, pero siempre siendo un hombre que se respeta a sí mismo y a su capacidad para responsabilizarse por su vida.
Lo que interpreto al ver tu correo es que has hecho lo que muchos de mis pacientes: leer apresuradamente el curso, como si fuera una especie de instrumento mágico que con solo tenerlo en tu ordenador ya tienes medio problema solucionado, y no es así. Debes leer el manual Reconquístala completo, intentar entender su significado y si es posible, cuando hayas acabado, ya con más calma volver a leerlo para captar todos sus matices.
De modo constante los lectores del curso me comentan que en una segunda lectura han asimilado muchas cosas nuevas que se les habían escapado en la primera. Esto es normal porque la primera lectura suele ser más ansiosa por estar la separación más cercana en el tiempo.
Una vez lo hayas vuelto a leer entenderás mejor por qué no hay que actuar como lo has hecho y sabrás cuáles son las otras tácticas que te propongo para los casos que me comentas, está todo en el libro. Invierte un poco de tiempo en él y comienza con la reconquista de tu pareja.
Muchos éxitos
Fabio Stussi
Autor del Método Reconquístala.